sábado, 17 de noviembre de 2012

DROGAS ACÚSTICAS

Sonidos Binaurales
Las señales binaurales son respuestas cerebrales auditivas que se originan en el núcleo olivar superior de cada hemisferio cerebral. 

Son el resultado de la interacción de dos impulsos auditivos diferentes, originados en cada oído por debajo de 1000 Hz y que difieren en frecuencia entre 1 y 30 Hz (Oster, 1939). 

Por ejemplo si se escucha un tono puro de 400 Hz en el oído derecho y otro de 410 Hz en el oído izquierdo simultáneamente, se crea una onda estacionaria modulada en amplitud de 10 Hz, la diferencia entre estos dos tonos es presentada en el cerebro como dos señales dentro y fuera de fase. 
Estas señales binaurales no son realmente escuchadas por el humano, ya que el rango de audición es de 20 – 20 KHz.

 Las frecuencias de onda cerebrales están estrechamente relacionadas con la actividad fisiológica de nuestro organismo. Esto es algo indudable, puesto que todo lo que conocemos en el mundo físico está compuesto por átomos que vibran a determinadas frecuencias.

 Estas “sustancias” acústicas no son tan intensas que las sustancias ingeridas como drogas, y necesitan de un periodo mayor de “ingesta” auditiva. Suelen aparecer los efectos entre 15 a 45 minutos dependiendo de cada individuo y del efecto requerido.


Para empezar, la lista divide las frecuencias en 3 tipos:
  • Ondas cerebrales:  son las frecuencias asociadas a los diferentes estados mentales. La sincronización de la onda cerebral es capaz de hacer que el cerebro responsa a una frecuencia determinada, y al hacerlo, alcanzar el estado mental que asocia a dicha frecuencia. Es propiamente lo que conocemos en esta web.
  • Frecuencias curativas:  representan las frecuencias solas o combinadas que podrían usarse para curar diferentes tipos de enermedades, o bien, estimular alguna región concreta del cuerpo. Se diría que son activadoras del chakras. Para el uso y empleo de este tipo de frecuencuas se utilizan dispositivos que generan campos electromagnéticos, pero también se pueden utilizar instrumentos que originan vibraciones e incluso sonidos.
  • Frecuencias  de entorno natural y universal: aquí se incluyen la gama de frecuencias naturales que suceden en la naturaleza, como por ejemplo la resonancia de Schumann. Se incluyen también frecuencias extraterrestres por así decirlo, o sea, tonos que han sido calculados a partir de las órbitas de diferentes planetas o satélites de la vía lácta. Algunos autores aseguran que existe la posibilidad de éstos puedan afectar al ser humano de alguna forma, aunque no es algo seguro hasta la fecha.

Las llamadas drogas acústicas no producen el mismo efecto que las drogas convencionales aparte de requerir audífonos con buena fidelidad y un estado previo de relajación y disponibilidad para escuchar por más de 15 minutos cierta estática que produce el ruido blanco.

 Al final no producirá nada en algunas personas y en otras creará ese estado alterado de conciencia.

Toda esta información no ha sido probada y contrastada por científicos por lo que realmente no sabemos si funcionan o si pueden ser igualmente peligrosas, adictivas o mortales para los consumidores por eso advertimos investigar mucho sobre el tema antes de consumir nada de este tipo, si introducen drogas en sonidos también puede introducir otras pautas de control mental o cosas mucho peores, aconsejamos no usar ningún tipo de drogas.




 Son composiciones que deben escucharse con auriculares para que surja el efecto. Con los auriculares podemos escuchar sonidos binaurales, o sea diferentes para cada oído. 
Estas diferencias pueden ser de tiempo, retrasando un sonido para un oído, o de intensidad, haciendo que se escuche más bajo de volumen en un oído respecto al otro.

 La teoría modular de la percepción musical, explica como los diferentes aspectos de la música (emoción, ritmo, tono, etc) se procesan en regiones diferentes y parcialmente superpuestas de ambos hemisferios cerebrales. Y además estas regiones presentan una gran variabilidad interindividual. Con lo que podemos deducir que no hay una zona destinada concreta a la interpretación de la música, sinó que nuestro cerebro trabaja como una gran red de interpretación y algunos de estos espacios coinciden con los relacionados con los que las drogas alteran con sus substancias químicas. Cuando excitamos estas zonas cerebrales a través del sonido, es como si lo hiciéramos con una droga convencional.


“Las drogas auditivas llegan a una zona llamada mesolímbica, que controla las emociones y provoca estados como de alegría, tristeza, relajación, que son comparadas a las que causan las drogas.”
(Citlali Melgarejo, subdirectora de Prevención de Adicciones del Instituto de Asistencia e Integración Social de la Ciudad de México)
 
 Los circuitos motores frontales se energizan para la acción en presencia de Dopamina. Los
circuitos Meso-Límbico y Meso-Cortical están relacionados con los sentimientos de
excitación y obligación que tenemos mientras buscamos los recursos necesarios para la
supervivencia.
La activación del sistema mesolímbico en humanos genera sentimientos estimulantes, una
sensación que algo muy interesante y excitante está pasando. El sistema de búsqueda
Mesolímbico activa un proceso motivacional.

 Los sonidos binaurales son una ilusión del procesamiento auditivo, que ocurre al escuchar con auriculares una señal que se emite con una frecuencia acústica distinta en cada oído. Por ejemplo si en el auricular derecho se emite una frecuencia de 300 Hz y en el izquierdo una de 310 Hz, el ritmo binaural sera de 10 Hz, y nuestro cerebro percibirá una pulsación de baja frecuencia resultante de la composición de los dos sonidos. La diferencia de frecuencias no puede ser mayor de 30Hz, porque entonces nuestro cerebro las percibirá como dos sonidos distintos. 
Se trata de una curiosidad, igual de intrigante que el ver una rueda girando hacia atrás cuando realmente lo está haciendo hacia delante, pero sobre la que los voceros vendehumo han puesto su punto de mira. Se les atribuye propiedades típicas de otros engañabobos, como mejorar la memoria, ayuda a dejar de fumar, remedio contra la obesidad o la impotencia, o para mejora del tono muscular. Incluso son presentadas como drogas digitales.

Este concepto de “drogas digitales” se empezó a escuchar a través de las redes sociales y en seguida tuvo una gran difusión, causando polémica, generando debates y creando un abanico de diversas opiniones sobre ellas.

En el blog de I-Doser se pueden encontrar las opiniones de personas que ya lo han probado y cuentan sus experiencias, algunos dicen que funciona, otros que no, y hay quien opina que depende de la dosis que te tomes, de tu personalidad o del estado de ánimo en el momento de tomarla, por lo que algunos van probando las diferentes opciones que ofrece I-Doser.

Carlos Tejero Juste, vocal de la Sociedad Española de Neurología comenta que probó las drogas sonoras en cuanto se enteró de su existencia pero que no le produjeron más que rechazo o, en algún caso, placer y nos indica que los sonidos binaurales sí producen alguna sensación anímica, pero no un efecto similar al de las drogas, además de que no tienen el carácter adictivo propio de ellas.

Otra opinión es la de Pérez del Río, que indica qué estas nuevas drogas encajan muy bien con los tiempos que corren, ya que al no introducir ninguna sustancia en el cuerpo, son acordes con el culto al cuerpo presente en la sociedad actual, aunque ve el peligro que pueden conllevar al poder incitar al consumo de las drogas tradicionales.

Sobre los sonidos binaurales, comentar que su creador fue el investigador alemán Heinrich Wilhem Dove, que las describió como señales de distintas frecuencias que suenan de forma diferente en cada oído y que cuando el cerebro lo procesa, se integra una tercera frecuencia de tono que es la llamada onda binaural y su descubrimiento data de 1939.

 Estas drogas auditivas se comercializan en unos 30 dólares, se bajan directamente a los reproductores de MP3, no existe nada en la ley que las prohíba, pues no se trata propiamente de marihuana, cocaína u otras sustancias, aunque las piezas llevan los mismos nombres.

“No es música, son sonidos oscilantes, te fijas en un sonido en específico y éste se interrumpe por la entrada de otro más y se integran así muchos, tu celebro empieza a entrar en otra dinámica”, sin embargo también platicó que las convulsiones son una realidad, “al quitarte los audífonos es como si te golpearan, duelen los oídos y escuchas el sonido por mucho tiempo”.

Se carece de un estudio que ofrezca las consecuencias reales de caer en estas drogas auditivas, sin embargo quienes las utilizan afirman que son mortales para los epilépticos.


 Nick Ashton, especialista en psicología, audio y música, creó I-Doser, un programa asentado en Estados Unidos, Brasil, México y Francia y que ahora se empieza a conocer en España. Por poco más de 12 dólares (algo más de ocho euros) el usuario puede conseguir un paquete de varias dosis: tripi/absenta/nitros rave, primer amor/orgasmo/éxtasis, un sinfín de posibilidades casi inimaginables. Es, en definitiva, un simulador de drogas que permite consumir sin hacerlo y que, según su creador, es efectivo y seguro. 


Estudios de sonidos binaurales desde 1939

Nick Ashton, creador del programa I-Doser, no es el descubridor de los sonidos binaurales como método para crear estados de ánimo concretos. De hecho, lo que hoy ya se conoce como drogas sonoras o digitales fue descubierto en 1839 por el investigador alemán Heinrich Wilhem Dove, que las describió como señales de distintas frecuencias que suenan de forma diferente en cada oído. Cuando el cerebro lo procesa, se integra una tercera frecuencia de tono que es la llamada onda binaural. En 1985, Robert Monroe, investigador estadounidense especializado en la alteración de la conciencia, señaló que los tonos binaurales en frecuencias beta (de 16 a 25 hercios) están asociados a la concentración. Diez años después, un psicólogo canadiense originario de Malasia, Chock C. Hiew, realizó un estudio en el que demostró que los tonos binaurales de rangos delta (de uno a cuatro hercios) y theta (de cuatro a ocho) están asociados con la relajación, la meditación y los estados creativos, además de ayudar a conciliar el sueño.

FUENTES:
http://www.aquiespuebla.com/vida-y-estilo/sentidos/8612-drogas-auditivas
http://cultura.elpais.com/cultura/2011/08/04/actualidad/1312408802_850215.html
http://www.eluniversal.com.mx/articulos/60178.html



No hay comentarios:

Publicar un comentario